sábado, 31 de enero de 2009

Me he abierto de capa; algunos de mis recuerdos ahora te serán tan claros como el agua (solo por momentos) pero luego vendrá tu muerte.


Hola!
He terminado el cuarto semestre de mi carrera
Y algunas otras cosas,
He terminado y no me siento bien por la forma en que esto dio fin,
Ni con algunas otras cosas,
He reprobado suficientes materias y he perdido un raudal de amigos,
He, igualmente, conocido personas que no sabía que fueran tan agradables,
He confirmado algunas amistades y he conocido que algunos y algunas que se dicen mis amigos son traición y decepción.
He vuelto a tratar con el hijo de la mujer que es un vasto territorio de carne morena y he comprobado lo bien que me cae, el niño me agrada y creo que yo también le caigo bien.
Eso es importante para mí;
Te explico (y ni así lo entenderás):
No me importa si kiddo no me habla, no me importa si krazy no me comprende, no me importa si el hada de bellos ojos no sigue mis consejas, no me importa si mi equipo se convierte en un enemigo de muchos cuerpos, no me importa si me reprueban, no me importa siquiera pasar encima de los sentimientos de alumnos y alumnos, no me importa ser un insociable freak… no importa, da igual.
Ese niño es el futuro…
Por eso lo aprecio,
Veo en el, lo mismo que veía en la amable Xochilt (volverás en forma de flama inapagable),
Veo el poder,
Veo un alma sin contagio de maldad,
Veo su pureza y bondad,
Veo que ese niño a sus escasos ocho años es mejor que todos nosotros, mejor que mi mismo, mejor que cualquier adulto.
Oh!
¿Que nos paso?
Y lo más tonto de inquirir seria…
¿Qué me paso?
Al igual que ellos 2, yo era un ser puro, era noble, era bueno, era inocente…
Creía que el mundo era perfecto y sus habitantes se refugiaban en leyes perfectas.
Hasta acudía por mi propio pie a la iglesia y me sentía contento en ese ambiente de caleidoscopio.
Ah! Que recuerdos de lo que fui.
Si, en ese entonces era tan solo un niño tímido que se la pasaba dibujando (mi verdadera vocación hereditaria por derecho).
Volcaba mis emociones en un cuaderno de hojas blancas (muchos años después volcaría mis emociones sobre otras personas) y era tan introvertido que nadie sabia lo que estaba pensando,
Trataba de ayudar a mi prójimo (aun lo hago, pero mis esfuerzos son inútiles, nadie se deja auxiliar) y obedecía ordenes.
Leía la Biblia y mis lecturas de sábados y domingos eran diccionarios y enciclopedias Laurosse, memorizaba nuevas palabras cada semana, todavía no me había invadido Internet ni la estrella flamígera…
Asistía al catecismo y me esforzaba por escuchar al viejo señor que nos daba la catequesis, les tenía gran admiración a las monjas (aun).
Escuchaba a Cri Cri y veía a Chabelo.
Cantaba con mi amada madre canciones infantiles (lo hicimos hasta casi unos meses antes de que yo entrara a la escuela secundaria) y esperaba todas las semanas ansiosamente a que mi Tía Chalia me trajese el comic del Hombre Araña que me compraba en el mercado Morelos.
Jugaba con mis muñecos y grandes batallas salían de mi imaginación mientras mis pobres monigotes sufrían los embates de las peleas que protagonizaban.
Oh, las películas de Capulina eran mi adoración y los monstruos de las películas del Santo me causaban terribles espantos.
A diario adquiría y mejoraba mi sentido del equilibrio gatuno en unas argollas que mi padre nos hizo; buena parte del tiempo me la pasaba colgado de cabeza en esas argollas. Eso era muy divertido.
El deporte no me llamaba la atención y jugar fútbol no era para mi algo que quisiera hacer en el recreo.
El ente Jakin Bohas no se manifestaba todavía y Rotceh 95 era apenas una sombra de lo que llegaría a ser, con el pasar de los años Rotceh 95 se apropio de mi cuerpo y vivió por mi una buena vida, claro que si. Eso fue raro pero fue divertido al igual.
Pero hey! Voy demasiado rápido.
He revelado demasiado hoy.
(Aunque a simple vista no lo parece)
Y en el proceso me he desviado del tema.
¿De que estaba hablado?
Uuh!
Olvido… nos sucede a todos.
Adiós!