Los dos tronos: amémonos de corazón, no de labios ni de oídos

Hola!
Tu trono esta asentado sobre radiantes ayeres donde todo era júbilo y abrazos fraternos.
Mi trono reposa sobre los cráneos de mis antepasados fallecidos y sus voces acalladas.
Tu trono esta asentado sobre un mar en calma y es coronado por un cielo azur brillante.
Mi trono esta asentado sobre la tempestad y su cielo solo conoce las nubes negras.
Los olores de la primavera llenan la bella estancia donde tu trono se halla.
El hedor de la muerte y lo putrefacto se desprenden de mi trono.
Tus bruñidos pies descalzos reposan sobre magnificas bugambilias de intenso colorido.
Mis pies fueron mutilados por los mismos seres que mataron a mis ancestros.
Tu trono esta hecho a mano, con madera de cedro y bañado en mágica plata.
Mi trono es un trono de calaveras.
Tu trono conoce del tiempo pero no lo mide.
Mi trono solo espera el día y la hora en que habrá de colapsarse.
Tu trono es portento nunca igualado, majestuosidad que maravilla a los demás reinos.
Mi trono es tan grotesco que no ha habido uno que voltee su rostro al mirarlo.
Tu trono y mi trono se encuentran en dos universos paralelos totalmente distintos…
Una aciaga noche el bufón de la Corte que yo represento me llamó a grandes voces,
Me explicó que estando durmiendo se le había presentado una visión en sus sueños,
Me dijo que la visión le mostró un mundo de grande belleza,
Y lo mas extraño fue que la emperatriz de ese reino podía ver mi mundo oscuro,
Ella podía verme a mí, sentado en mi horrendo trono viendo pasar los días como bruma,
Mi Yo interno anheló conocer también el mundo que me veía desde el otro universo.
Así que el bufón me inició en los secretos mágicos para revelar otras realidades,
Al cabo de un año yo ya podía “ver” lo que a los ojos estaba oculto,
Por dedicarme tanto a esta santificada misión, descuide mi triste reino y a sus habitantes,
Mi trono estuvo vacío por larguisimos meses que se asemejaban a años,
Cuando por fin pude echar un vistazo, a través de la magia, al reino del otro universo
Vi a la emperatriz, vi su hermosura y vi que todo lo que ella hacia era bueno.
Alterado, decido atravesar el espacio-tiempo y encarnarme en ese otro mundo.
La Alta Magia y la tecnología hicieron posible que yo llegara al universo tuyo.
No me importaron las quejas de mis fieles, no me importo nada. Nada!
Y así, mi trono fue ocupado por el amigo bufón la misma noche que abandone el reino,
Coros de niños cantaban odas en mi nombre, mientras mis negrísimos ojos luchaban por no derramar inútiles lágrimas…
Atravesé la barrera ínterdimensional que divide tu trono de mi trono, mi universo del tuyo. Mi tristeza de tu felicidad.
Es inadmisible medir a ciencia cierta cuanto fue el tiempo que tardé en llegar al mundo de tu trono; no sé si fue una eternidad o tan solo un segundo.
Lo que si sé, es que tuve que pagar un precio.
Para poder existir en tu bello mundo, hube de nacer de nuevo.
Mi cuerpo original no soporto el viaje entre universos, morí mas de mil muertes antes de poder encarnarme en el mundo de tu trono.
Llegué a este ajeno universo, a este: tu feliz mundo; una oscura madrugada de Agosto.
Al nacer, carecía de todos los dones; estaban dentro de mí, pero la pérdida de mi cuerpo original me hizo débil y demasiado humano.
Incluso olvide el motivo por el cual estoy aquí,
Incluso olvide lo que era, lo que soy y lo que llegare a ser.
Incluso olvide tu trono y mi trono.
Pero…
Empiezo a recordar, emperatriz.
Hija de tu bienamada.
Te encontrare y si ya no existes, tendré que inventarte.
Adiós!