El recuento de los daños: quinto semestre.

Hola!
Este semestre descubrí muchas cosas:
A principio del año me entere que algunas personas dicen que yo adoro a la santa muerte! No pude sino reírme y no afirmarlo ni negarlo, sino todo lo contrario. Desgraciadamente no pude obtener la información acerca de quien “libero” el rumor y me quede con las ganas de hacer un reclamo.
Una cosa que este semestre hice fue regalar cartas para el día 14 de febrero. La idea siempre la tuve pero no me animaba a hacerlo. Solo regale estas cartas a las personas selectas, casi divinas. Regale una a Mirna porque es y será una chingona de chingonas aunque todos piensen lo contrario! Regale una a Yuri porque sus virtudes se ven reflejadas en su hijo Ángel y solo por eso lo hice. Regale una a Lisbi Consuelo porque fue de las primeras personas en conocerme y en soportar mis tonterías. Regale también una a Juliette porque la señora es súper, jamás me ha tratado mal y solo tengo elogios para ella. Regale una a Krazy porque es la persona más cercana a mí y porque al mismo tiempo tenia que disculparme por todo lo mal que la traté el semestre pasado.
Esta lista de cartas incluía a la mismísima Navili (el hada de bellos ojos a la que he dedicado algunos posts en meses pasados) pero a la hora de la verdad me arrepentí y su carta la guardé en la bolsa de mi camisa. Pasaron las horas y la carta nunca la entregue. Paso una semana y la carta tuvo que ser tirada a la basura para nunca jamás conocerse su contenido. De lo único que estoy seguro es que su carta era la mejor de las otras cartas, pero simplemente no pude entregársela. Irrealizable.
Es de comentarse que la carta que le entregue a Krazy la reencontró conmigo y con mi delirio. En estos momentos Krazy es mi adoración y la quiero (a mi loca manera) a raudales. Ella es un como un Smiley gigante. Mi smiley!
Por decisión propia corté paulatinamente la comunicación con Kiddo hasta grados que rayan en lo absurdo. Hice bien y nunca me arrepentiré de olvidarla.
Este semestre fui regañado varias veces y sometido a humillación publica (delante de la clase) por dos asesoras pero supongo que lo hacen por mi bien, así que acepto todos los regaños posibles que de ellas vengan.
La tercera asesora (que es mi consentida, pero Shhh que nadie se entere!) nos llenó nuestro poco tiempo libre de tareas por demás asombrosas, ya no sabíamos si lo que hacíamos era tarea o que rayos! Me jacto de tener varias de sus tareas con la palabra “excelente” como calificación. Aunque de nada sirvió porque reprobé la materia (por segunda vez) pero a mi, chiras pelas.
También este semestre sufrí el peor desaire que un equipo completo me ha hecho. Yo estaba decidido a hacer una película y el guión (surrealista) de esta película fue rechazado rotundamente por el equipo que sentía yo era perfecto para protagonizarla. Me provocaron tal daño que decidí no participar en su paupérrima exposición e hice bien porque lo que ellas hicieron no se puede comparar con la película que yo ideé pero que su incomprensión no me dejo materializar.
Pero algún día obtendré mi revancha! Nadie le dice NO al Bohas sin obtener represalias.
Entre otras cosas, tuve oportunidad de conocer un poco mejor a la “diosa con cabeza de gato” y descubrí que no es tan fresa como aparenta y parece que es una buena persona y es bien portada. Si el amigo “Peluche” logra algo mas serio con ella, se va a sacar la lotería con esta muchacha. A ultimas fechas “la diosa con cabeza de gato” se separo de su inseparable amiga y no tienen para cuando volver.
Este semestre llegue a experimentar sensaciones que me hicieron dudar de mi propia capacidad docente… pero no les hice caso.
Este semestre debo obtener un promedio más alto que el anterior.
Este semestre se sumaron tres preñadas mas a la ya de por si larga lista de embarazadas que ha habido en el salón. A una de esas tres aplica la siguiente canción que aprendí por ahí:
“y lunes y martes y miércoles tres,
Y jueves y viernes y sábado seis,
¡Y DOMINGO SIETEEEEE!”
O lo que es lo mismo… el pez por su boca muere; de nada sirve que me cuentes que eres casi casi una santa purísima si con hechos demuestras todo lo contrario.
Este semestre que casi termina me dio un regalo inesperado (cortesía de la profe Isabel);
Me vi inmerso una vorágine fílmica que yo no esperaba, pero la hube de realizar con interés solo para demostrar quien es el mero cabrón de cabrones en lo que a filmacion se refiere. A veces me pregunto si la profe hizo esto para complacerme, pero luego pienso que es tonto pensarlo y lo olvido. El hecho de ser el único miembro del grupo que estuvo presente en todos los cortos que el grupo realizo me permitió obtener una visión extendida de cómo trabajan los equipos, quien manda en los equipos, como manda y quien es el débil del equipo, incluso me permití ver como la cabeza de un equipo echa a perder a todo su equipo, por supuesto también fue testigo del poderío que el equipo liderado por la compañera Erika despliega tanto en escena como fuera de ella. No pude mas que quedarme boquiabierto por la forma en que se ese equipo trabaja. Todos mis respetos para ellas.
La película editada duro una hora y no fue totalmente de mi agrado, yo hubiera hecho algo mas teatral o quizás una novela futurista ambientada en el pasado (si, esto es posible); pero lamentablemente la película (mediometraje) fue impuesta de improviso y no dio tiempo para que los jefes de equipo se sentaran tranquilamente a charlar de propuestas.
Ya casi para cerrar el semestre volví a echar a perder mi amistad con la gentil y siempre agradable Krazy, lo hice porque estoy loco; a fin de cuentas enderece el camino y nuevamente somos amigos aunque temo echar a perder nuestros lazos.
En general, este semestre fue bueno para mi, me ayudo bastante el hecho de que olvide a kiddo, el hecho de que me perdí y en el camino encontré a Krazy, el hecho de que me reencontré conmigo mismo y me hice mas fuerte, el hecho de que me basto de mi mismo para superar a otros también me ha ayudado.
En fin, este semestre fue una buena pelea.
Gracias a todos y todas.
Adiós!