Fase 99: “Fuego” (3).

Hola!
Tercer poema de la fase 99; en esta pequeña historia, la conexión con la ficción cinematográfica es notable. Es cruel, no competente para cualquier persona. No se porque lo escribí, no comulgo con muchas ideas de lo que aquí se cuenta, pero veo en el una válvula de escape. Fue escrito originalmente el 3 de diciembre de 1998.
Dice así:

Joven autodestructivo que hoy te encuentras mirando los monstruos pasar por tu ventana…atiéndeme.
Sodoma y Gomorra fueron solo el principio; tú serás el final.
Te preguntare: ¿Puedes caminar por sobre las olas e inspirar la fe para que otros lo hagan?
¿Puedes invocar a tu oscuridad y darle los motivos del lobo?
¿Reclamaras sangre para ti mismo?
Las jóvenes besaran tu boca y con su veneno básico harán de ti un zombie, muerto viviente y débil de carácter…
Tal fue el legado de la que probo del árbol prohibido y degenero su cuerpo.
Con la noche aparecen los miedos, y el temor a los fantasmas te obsesiona; no te puedes tapar con una cobija porque resulta muy infantil…
Entre sonidos extraños escuchas melodías de amor no agradables,
Música que se oye lejos pero parece que proviene del cuarto contiguo,
Suele ser tenebrosa y en algunos casos melancólica…
No la puedes dejar de oír.
Al canto del gallo, se ha extinguido y un ligero escalofrío te sacude…
Bailas solo en tus pies descalzos.
Mas ruidos…
No no no…
El señor superestrella nos esta reclamando presencia…
No no no…
Quédate conmigo [nombre censurado], necesito tu cuerpo.
No no no…estoy en el horno; a través de otros ojos experimento visiones siempre en tinieblas…
La llegada del destructor en verdad toma peligrosas secuelas, solo es 1, no son 2 ni 10.
Esta vez el asesino entra a tu casa y mata a toda tu familia, fornica con tus mascotas y el drama se vuelve mas intenso cada nano segundo…
Blasfema contra los santos y las vírgenes que cuelgan de las paredes.
“es mi esposa” grita tu padre, y se desata una hemorragia por sus sesos…
Gritos en el traspatio; alguien es desollado vivo…
Sigues escondido y conservas una mortal daga en tu mano izquierda…
Sodoma y Gomorra fueron solo el principio.
Hay alerta en tu escondite, un cuchillo rebana tu lengua y otro hace estallar las vísceras del asesino
¿Duele?
…pero no te quejas,
Al descubrirle el rostro, rompes en llanto…era tu hermano menor…ahora en tus ojos no hay vida…
Tú serás el final…
Y no te afliges…