Nada, excepto tormentas (parte 4)

Hola!

El sábado 26 septiembre liberté de su sombrío sarcófago a CVALDA,
Le insufle aliento de vida,
Le procure mil cuidados y,
La lleve conmigo a la escuela.
INES estaba a mi izquierda (Inez to my left), CVALDA se entusiasmo de ver la luz del Sol. JAKIN y BOHAS se arrellanaban encadenados en la sombra de mi mente.
ROTCEH aun permanece aprendiendo de los aliados a como saltar al vacío y caer ileso en otra ciudad lejana al punto del salto… asi que por solo un día pude liberarme yo mismo de ellos y ellas. Y asi fue como llegué a la escuela, temprano como debería de ser.
Desastrosamente ese día, el primer asesor rebaso su hora de entrada y la clase empezó casi a las nueve a.m.
Como sea, antes de eso; me preparaba repasando la exposición que tendría en pocos momentos, estaba solo, lejos del mundanal ruido, escuchando música de F. Chopin en mi castigado teléfono.
Al poco rato mis ojos se iluminaron, la divina Mercedes reapareció; ella y yo teníamos asuntos pendientes, negocios inconclusos.
Para sorpresa mía, ella fue a buscarme hasta donde yo estaba. Tan bonita como siempre. Radiante en la plenitud de su preñez
Iba con los brazos abiertos, no la decepcione y le di el abrazo que habría de reencontrarnos en esto que llamamos amistad. Me abrazó tan fuerte que pude sentir su alma.
Nos sentamos,
Hablamos,
Reímos y nos contamos cosas.
Pero nunca le pedí perdón por mis acciones del pasado, pues todo debe ejecutarse en el momento exacto, no antes, no después.
Luego ella llamó a alguien…
Tú sabes quien es.
Pero yo no volteé a mirar… perdonad.
La primera clase terminó y nuestro equipo y tres más no expusimos, será para el próximo sábado.
La primera clase acabó (entre comillas y subrayado) y antes de que entrara la asesora de la segunda clase yo ya sabia lo que tenia que hacer.
Solicite la presencia de Krazy y retomé la conversación con Mercedes.
Ya era el día y la hora, asi que con toda la humildad que puedo llegar a tener le pedí perdón a Mercedes. La miré fijamente a los ojos y no dejé de hacerlo hasta estar convencido de que ella comprendía mis actos y mis palabras.
Ella lo hizo.
Krazy fue mi testigo y fue mi apoyo, sin querer esta inmiscuida en mis asuntos hasta el cuello, pobrecita, por eso la preservo. Gracias Krazy!
La segunda clase dio inicio y yo ya estaba afuera.
(Quise decir estábamos afuera)
Luego,
Bueno, aquí debería escribir un apartado bastante extenso acerca de lo que paso después.
Pero, no revelare las cosas que ahora se, cosas que ahora compartimos.
No traicionare tu confianza depositada en mi; no diré nada…
Excepto tormentas.
…
Para asi llegar a la tercera clase!
A la tercera clase no entré porque las actividades físicas y yo como que no estamos hechos para estar juntos…
Cuidado! Mi condición física es excelente y envidiable para muchos, lo que pasa es que las actividades al aire libre son muy propensas a provocar desfiguros y a llamar la atención de los curiosos y eso nunca lo he gozado.
O dicho de otra manera… ¡Que oso!
La cuarta clase fue un efímero pánico.
Expusieron dos equipos, yo estaba junto a Krazy.
Lejos del mundanal ruido, sumergido en el ruido de ella.
La clase termino antes de las cuatro p.m.
Ella (no, no ella sino la otra que tampoco es esa) y yo nos fuimos juntos hasta la parada de camión.
Hey…
Sé que no se quien soy,
Sé que lo que hago me hace,
Y también sé...
Que no se a donde voy, pero…
Quiero ir contigo!
¿Quieres tu, venir conmigo?
(Antes de que me encuentre saturado de nada…)
Excepto tormentas.
…
Ese anormal sábado me hice de dos películas… Holy Mountain (tan complicadamente ineludible en mi vida que es la tercera vez que la compro) y Children of the Dune (¡265 minutos en su solo dvd!)
El día hubiera terminado bien, de no ser por la Fionna que me prometió insolentemente: Nada…
Excepto tormentas.
Por cierto, no fue sino hasta el domingo a las tres de la madrugada que descubrí que CVALDA había regresado voluntariamente a su sarcófago de plata y cedro para revolcarse graciosamente en su vómito.
En su tiempo y en su hora, será liberada de nuevo.
Pero, hoy por hoy…
Bohas es el amo.

Adiós!