domingo, 25 de octubre de 2009

Puedo escribir los versos mas tristes esta noche


Adiós!

Podría haberte escrito los versos mas tristes esta noche,

Debería haberte escrito los versos mas tristes esta noche, pero…

Seria una ofensa imperdonable para el poema de Pablo Neruda.

No hermosa Hurí… lo que si haré es describirte el sueño que tuve, y como me pasé una semana sin saber su significado hasta que por fin me fue revelado el día sábado 24 de octubre y acerca de cómo hallé la libertad en mi derrota.

El espejo esta roto para siempre, ahora…

Corto.

Aparto.

Retiro

El sueño empieza conmigo mismo enterándome de que estas enferma, aparentemente muy enferma; como se supone que yo ya he estado antes en tu casa se me ocurre ir hasta donde vives para saber que tan grave te encuentras.

De repente me encuentro en la esquina que doblando a la derecha llega hasta tu casa.

Tú casa esta pintada de un color verde brillante, la forma es idéntica a como la recuerdo cuando estuve allí. Yo toco la puerta y una persona que desconozco me pregunta a quien busco, le digo que a ti, ella me hace pasar.

Ya dentro de tu casa, me doy cuenta que no es lo era; es un lugar lleno de gente enferma, no hay muebles ni aparatos eléctricos, todo lo que hay es gente postrada en camastros o tiradas en el suelo, escucho lamentos y quejidos de dolor; el lugar apesta a hospital, el suelo es un mosaico blanco lleno de mugre.

La persona que me abrió la puerta se ha ido (pero eras tu y no me había dado cuenta), ha desparecido de mi vista; asi que yo me dedico a buscarte entre tanta locura y enfermedad.

No te encuentro, no hay rastro de ti. Es como si no existieras, pero algo dentro de mi me obliga a seguirte buscando porque yo se que tu querrías que yo estuviese contigo. Asi que subo al segundo piso, la escalera esta llena de enfermos vestidos con sucia ropa blanca. Nadie me esta mirando, están como sumidos en su propio dolor. Nadie cuida de nadie y nadie esta sano en ese lugar.

El segundo piso continua infestado de dolor y mugre, pero a mi no me importa porque yo quiero encontrarte, pareciera que te escondes de mi o de lo que yo represento.

Sigo caminando entre gente tirada en el piso y veo con claridad una única recamara en aquel lugar, mi escasa inteligencia me induce a pensar que tu deberías estar ahí en esa recamara pues tu familia y tu habitan esa casa y seria impensable que tu familia te dejase tirada en el suelo como a los demás enfermos.

Esa recamara no tiene puerta, pero esta llena de todos los lujos innecesarios con que personas innecesarias son tan felices; llego hasta donde ésta la cama, que es una cama con un pabellón grandísimo, para según yo por fin hallarte y al abrir el pabellón me encuentro con muchas personas enfermas dentro de esa cama, están apiladas unas sobre otras, pero ninguna de ella eres tu.

Me alejo de ese lugar tan horrible, me salgo de la recamara y cuando estoy a punto de bajar al primer piso alcanzo a ver en el mas sucio rincón a una persona que esta alejada de todas. Eras tú, Hurí; arrojada al suelo como los demás enfermos, emponzoñada de alguna extraña enfermedad que te obliga a morir lentamente.

Me quedo detenido enfrente de ti, te veo con un dejo de tristeza pero no puedo hacer nada por ti; ya no, me digo a mí mismo que hice todo lo que pude y fue de en balde.

Que horror.

Estas muriendo y no puedo hacer nada. O tal vez quise hacer algo por ti pero ya es tarde muy.

Los poderes que me poseen me obligan a dejar tu casa y yo te dejo ahí tirada, sola, pudriéndote en tu propia inmundicia, viendo como cada respiro tuyo es un conteo regresivo hacia tu propio final.

Salgo de tu casa y vuelvo a la realidad…

Despierto del sueño y, lo primero que quiero es conocer su significado… se lo cuento a mi ama pero ella solo finge que me escucha. Me siento incomprendido, fuera de mi propia realidad, divergiendo nuevamente entre el mundo de los sueños y el mundo real.

Y asi estuve una semana sin saber el significado del sueño… hasta que llegó el sábado 24 de octubre y si, efectivamente…

Tal como me dijo el acordeón: “paso lo que tenia que pasar”

Y me alegré por ti, Hurí

Y supe que mi obra contigo estaba concluida.

Y me derroté a mi mismo porque nadie más puede hacerlo

Eso es todo.

El fin al fin.

Ya no la quiero, es cierto, pero cuanto la quise…



No hay comentarios:

Publicar un comentario

dudas, sugerencias o comentarios?